"El trabajo de Oleg Dou desarrolla y empuja hasta el límite la idea del cuerpo como objeto de subversión, distorsiones y otras mutaciones que atentan contra su integridad. En una entrevista con la Zoom Magazine, el joven fotógrafo decía: “Me apasiona el rostro humano. Utilizo la naturaleza artificial de la fotografía digital como instrumento para reflexionar sobre las contraposiciones entre vivo y muerto, atractivo e inquietante, hermoso y feo.”
Oleg Dou recurre a la fotografía digital para retratar personajes ficticios e indagar sobre los conceptos de belleza, perfección e inocencia. Sus imágenes, que remiten al universo del videojuego, el kitsch o la moda, son inquietantes y tranquilizadoras a la vez, de aspecto enfermizo pero raramente juvenil y vital. Con un trabajo de extrema pulcritud, Dou anima estas emociones ambivalentes, procurando agitar en el espectador el sentido de lo que es normal".
Informa Galería Senda.