Hay veces que preferimos quedar como unos maleducados antes que dar los buenos días al entrar en un ascensor y no es porque nos cueste, es porque, si lo hacemos, corremos el riesgo de que surja la conversación y ya sea demasiado tarde para evitarlo. Y es que, como ya se sabe, hay a quien le dices .- ¿Qué tal?- y va y te lo cuenta y ya tiene uno bastante con lo suyo como para tragar penas ajenas. A Manuel le pasa lo contrario, no hay día que no salga a la calle sin que alguien le pregunte por cómo va esa vida y es que, la de Manuel Tallafé, no es una vida cualquiera, es la vida de un artista que desde niño en Cádiz ya conseguía la atención y el aplauso desarrollando cualquiera de sus facetas artísticas, Manuel es uno de eso actores que, además de interpretar, canta baila y tiene gracia de cuna, de esa que no se puede disimular. Años dedicado al cine, la televisión, al teatro y a la música en directo han dado para mucho que contar. De eso va precisamente "Como un boomerang" de una vida llena de arte y guasa. Cuando comienza el espectáculo el público se encuentra con una retahíla de aventuras con Manuel como protagonista a las que no le falta un reparto de lujo, Anécdotas compartidas con: Álex de la Iglesia, Santiago Segura, Enrique Villén, yo mismo o el mismísimo Tarantino, además de inolvidables amigos que se marcharon como Sancho Gracia o Juan Luís Galiardo entre otros, surgen de su boca para saltar las lágrimas a los asistentes, al mismo tiempo que nos preguntamos si, eso que cuenta Manuel, pudo ser o no pudo ser así, como le pasaba al mítico personaje de " El Viaje a ninguna parte". Manuel no da puntada sin hilo y ese hilo es el humor, con el que va hilvanando una a una las anécdotas de su vida con canciones que borda. Un boomerang de buen rollo que mientras va y viene, de Cádiz a Madrid y de Madrid a Cádiz va sembrando la alegría por donde pasa.
Juan Ochoa
Amigo y fedatario público de las aventuras y desventuras de Manuel Tallafé.