Sin querer hacer un spoiler, les voy a decir cuál es el secreto de Nocturnos: la sencillez. Una sencillez eficaz, que muestra el resultado final. Atrás quedan horas y horas de trabajo en casa y en el local. Allí han abierto las tripas de la canción, han dibujado a lápiz todo lo que les ha salido de la cabeza, pero al pasar la ilustración a tinta, han borrado todo lo innecesario. Así, salen canciones pegadizas, que no pegajosas, nada gruesas, nada espesas, de esas que haces que vayas tarareando el final de los estribillos aunque sea una de las primeras veces que lo estás escuchando. Y esas letras obtendrán un reflejo en cada oyente. Monti, como un oyente más, también tiene el suyo. Nocturnos tiene un subsuelo en el significado de sus canciones.
Estas composiciones que escuchas salen de las manos de una banda que tiene el culo pelado. Antes de embarcarse en Nocturnos, han desempeñado muchas otras posiciones en el tablero de la música: desde músicos en una orquesta, pipas de otros artistas, integrantes de bandas tributo, arreglistas para otras formaciones... súmesele la cantidad de canciones compuestas y descartadas durante más de siete años en el local y en vivo y obtendrá sintetizada para su deleite la irresistible oferta de Nocturnos en un solo disco. Se lo han puesto fácil. Solo tiene que darle al play. Ellos se encargan del resto.
ANGEL CARMONA (Hoy Empieza Todo. Radio3)