No es frecuente, pero hay trenes en la vida que pasan dos veces. Forjados en 1991 al albor de bandas norteamericanas como Lynyrd Skynyrd, Georgia Satellites o Cracker, Los Avaros emprendieron una intensa y fugaz travesía musical que se vio truncada, apenas tres años más tarde, por esos azares del destino que muy pocos recuerdan y que a nadie le importan.
Por suerte, Los Avaros llegaron a tiempo a la segunda estación. Veinte años después, la madurez capituló ante el inconformismo y Los Avaros renovaron con fuerza sus votos por el Rock para combatir prejuicios, plantar cara al hastío y correrse unas buenas juergas sin excusas de por medio.
Desde entonces pasean su repertorio, propio y prestado, por los templos del circuito madrileño en una trepidante y eléctrica romería que, al fin, hace parada obligada en CAFE LA PALMA, capilla de referencia para la banda. Honestos y dispuestos, armados con buenas razones y mejores canciones, Los Avaros garantizan una intensa experiencia cargada de energía, pasión y buen rollo a borbotones. Pure Rock Meat.